SOS PARA LOS BOSQUES GALLEGOS: NO a la mina en Pico Vello

Oposición en el lugar donde se pretende ubicar la mina

Diferentes colectivos ecologistas de Galicia se han movilizado para exigir la preservación del lugar de Pico Vello en As Pontes (A Coruña) y la paralización del proyecto minero. A pesar de la oposición de los colectivos sociales y ayuntamientos afectados, la administración gallega no ha asumido todavía su obligación legal de proteger el medio ambiente y apuesta sin embargo por garantizar los intereses económicos de los promotores de la mina, que reciben 6,3 millones de euros (7.748682 USD) en ayudas públicas. Los puestos de trabajo ofrecidos por la empresa no justifican la destrucción de un espacio de gran importancia ambiental, ni mucho menos el riesgo en el que se pone la salud de la población contaminando las aguas que emplean.

En marzo de 2005 el gobierno autonómico de Galiza sometía a información pública el plan de la multinacional sudafricana Picobello Andalucita, S.L. para la explotación de un yacimiento de andalucita en la localidad de As Pontes. Este mineral es apto para la fabricación de materiales refractarios especiales capaces de soportar altas temperaturas y se utiliza para la construcción de hornos industriales para la industria química, siderúrgica, metalúrgica, del vidrio, refinerías de petróleo, cementeras, ladrilleras, cerámicas, etc.

El proyecto fue rechazado en septiembre de 2006, tras comprobar que la mina invadiría el Parque Natural Fragas do Eume. Meses después, la compañía remitió una nueva propuesta reduciendo las dimensiones de la explotación, retirándose a tan sólo 50 metros del Parque Natural. Esta distancia es insuficiente para frenar las emisiones de polvo, gases y ruidos que acabarán afectando sin duda al espacio protegido, así como a las viviendas colindantes. Incomprensiblemente, en febrero de 2010, el proyecto salvó el escollo administrativo y fue aprobado.

Los mismos riesgos ambientales recogidos en el primer proyecto continúan presentes en este segundo. Así, de llevarse a cabo supondría la destrucción de nacimiento del río Belelle, contraviniendo la legislación sobre minería que prohíbe las obras a menos de cien metros de alumbramientos de aguas. También se incumple la ley al no priorizar el abastecimiento público, en detrimento de otros usos, ya que el río Belelle abastece a una parte importante de las poblaciones cercanas.

Por otro lado, la zona prevista como escombrera se sitúa sobre un afluente del río Eume, principal cauce del Parque Natural, lo cual supondría un peligro continuado para la calidad de sus aguas, tanto por las emisiones de polvo y efluentes, como por la posibilidad de rotura de las balsas de decantación.

La misma zona de explotación recogida en el proyecto comprende un bosque autóctono de 25 hectáreas que sería arrasado. Este tipo de bosque, la fraga, representa en Galicia una reserva de biodiversidad, en la actualidad ya fuertemente amenazada en número y extensión debido a la expansión de especies alóctonas como el eucalipto y la construcción de grandes infraestructuras. La Administración gallega ha pasado por alto que una zona muy próxima a Pico Vello está incluida en la propuesta de Ampliación de la Red Natura 2000 como un espacio a proteger bajo esta figura de conservación europea, pero en esta propuesta se ha dejado fuera a Pico Vello. Los colectivos ecologistas ya han presentado una denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente por las irregularidades en el proceso de tramitación de las concesiones mineras. Apoye el llamamiento de los ecologistas y envíe una carta a la Xunta de Galicia expresando su preocupación e indignación por este tipo de políticas destructoras.