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El Saloncito de Ross

POR QUE NOS HAS ABANDONADO

POR QUE NOS HAS ABANDONADO


Capítulo IV


Las últimasconexiones con las Omega son positivas, todas ellas funcionando al completo. Las cuatro primers naves ya han salido del espacio de comunicación automático. Los superiores dos y siete contactan con ellos por telepatía, el resto de las naves todavía comunican por sensores
   - Control Estelar enterado, seguimos a la escucha.

La Galaxia Opal es una de las mayores del Primer Universo, al menos eso se ha creído siempre en Opal. Supongo que en todas las galaxias se tiene el convencimiento de que la propia es la más avanzada, la más interesante, siempre ocurre lo mismo hasta que se tropieza con otra más avanzada.
Una a una todas las naves desaparecieron de las pantallas de seguimiento de Centro Beta. A partir de ese momento y hasta que cruzaran la barrera interdimensional que separa los universos, la comunicación entre las Omega y Centro Beta sería únicamente telepática. Con todo, no había aparecido en el horizonte todavía el sexto Disco cuando surgió el primer problema.
   - Centro Beta para Control Estelar, Centro Beta para Control Estelar, clave Omega en emergencia Cuatro, clave Omega en emergencia Cuatro, nave Doce sin comunicación telepática posible.
   - Control Estelar enterado ¿qué rumbo seguía?
   - La nave Doce desapareció de las pantallas en las coordenadas 204-18-36; continuó el contacto telepático con el Superior Siete hasta las coordenadas 204-96-41. Posiblemente se perdió en el hiperespacio, el resto de los Am-Or comunican que perdieron el contacto con la nave Doce al iniciar la velocidad lumínica.
   - Control Estelar enterado. Que continúe emitiendo el Superior Siete, si el resto de las Omega respnden bien, no hay tal emergencia, se puede prescindir de una nave, está previsto.
   - Centro Beta enterado. Continúa Clave Omega.
   - Comunica el Superior Dos que ya han cruzado la barrera interdimnesional cuatro de las Omega, y el resto se propone hacerlo en las prósimas 18 divisiones de hora. Clave Omega en vías de éxito. Podemos olvidarnos de la nave Doce...

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