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El Saloncito de Ross

Crímenes de honor: otra forma de violencia contra la mujer

Crímenes de honor: otra forma de violencia contra la mujer

Por: Mundo Cooperante

 

El próximo 8 de marzo, la Fundación Surgir de Suiza, viene a España invitada por Mundo Cooperante para hablar sobre los crímenes de honor, una forma específica de violencia de género que cuesta la vida a más de 5.000 mujeres en todo el mundo cada año.

 

El próximo 8 de marzo, la Fundación Surgir de Suiza, viene a España invitada por Mundo Cooperante para hablar sobre los crímenes de honor, una forma específica de violencia de género que cuesta la vida a más de 5.000 mujeres en todo el mundo cada año.

Cada año son asesinadas en el mundo más de 5.000 mujeres en nombre del honor. Por haber elegido libremente a sus prometidos, por ser sospechosas de haber mantenido relaciones sexuales antes del matrimonio,o porque su conducta se considera “inmoral”, son sentenciadas a muerte por sus propias familias.

Ante una realidad tan cruel como desconocida, la Fundación Surgir, invitada por la ONG española Mundo Cooperante, presentará en Madrid el próximo 8 de Marzo, día Internacional de la Mujer, su informe “Combatir los Crímenes de Honor en Europa”, un informe que trata de arrojar luz y conocimiento sobre este tipo de violencia contra la mujer.

Abrasada por su propia familia

Una víctima de un crimen de honor narra por qué su familia quiso matarla

Acostumbrarse a su cara cosida a cicatrices fue lo más duro. Mucho más que adaptarse a Europa, aprender otra lengua y construirse una nueva identidad. Durante más de veinte años el espejo siempre le devolvía unos ojos grandes y asustados en una cara desfigurada. Y algo peor: "Me miraba y veía a mi madre. El mismo hueso de la nariz pegado a la frente, idéntica expresión. Lloraba", afirma Souad, una antigua campesina cisjordana de 46 años que a los 17 fue sentenciada a morir por su familia por quedarse embarazada antes de casarse. Souad no quería ser su madre, no quería verse en ella. Su madre representa el fantasma de la sumisión, la negación total como ser humano. "Hace cuatro años fui al quirófano de nuevo para que me quitaran ese hueso". Ya no se parece a su madre. Su cuerpo ha soportado 27 operaciones. Y se someterá a una más para eliminar marcas en el cuello y la cara. Borrar cicatrices, ése es su empeño. "Antes, en verano, iba tapada, no podía bañarme en público. Ahora empiezo a verme guapa. Pero no quiero olvidar. Recordar duele, pero contar lo que sufrí ayudará a otras chicas".

martes, 25 de noviembre de 2003

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